Junto al gorrión y al chingolo son los paseriformes más conocidos de la Argentina, y se la encuentra tanto en ambientes naturales como citadinos. Mide tan solo 12 cm y suele exponerse cuando realiza su canto característico. Se alimenta fundamentalmente de invertebrados como arañas, orugas, saltamontes, etc. Anida en todo tipo de huecos, tanto naturales como en los que forman parte de construcciones humanas. El nido es redondo y lo construye con ramitas y hojas; pone unos 6 huevos blancos con manchas rojizas.